Viviendo con una ataxia de Friedreich desde hace más de tres décadas

miércoles, 31 de agosto de 2011

Mereció la pena....




Hace años que utilizo los veranos para mantenerme, y lo seguiré haciendo mientras Dios quiera.


Todos los días -más de un mes- nadando; haciendo largos, boca arriba, boca abajo, abdominales, jugando a la pelota...


Con el agua helada, con agujetas, con dolores (tengo una contractura en la espalda)




Y hasta alguna vez con lágrimas, y otras cantando.




Pero mereció la pena... ¿o no?




(las fotos que he puesto por facebook y mis blogs me las hicieron el sábado pasado y ayer.